#Silvio_ElCauAmic

Me llamo Silvio, tengo tres meses y hasta hace pocos días no sabía muy bien cómo había llegado a este refugio.
Yo estaba con mis padres y mis tres hermanitos viviendo en la sierra de Granada, pero un día nos despistamos y perdimos de vista a nuestros padres, nos quedamos solo uno de mis hermanitos y yo. Pasamos hambre y teníamos mucho frío por la noche, porque el viento en la sierra es fuerte.
Una mañana vinieron unos chicos con una jaula mayor y aunque teníamos mucho miedo, mi hermano y yo nos metimos dentro porque había comida.
Los chicos que nos cogieron nos decían que no tuviéramos miedo, que estaríamos bien, entonces nos metieron en una furgoneta y allí estuvimos muchas horas. Conocimos a otro perrito y nos hicimos muy amigos.
Después de varias horas llegamos los tres a este refugio y ya empecé a enterarme algo mejor de la historia de mi hermana y mía.
Me han puesto de nombre Silvio ya mi hermana Fiona, el perrito que vino con nosotros en la furgoneta se llama Niko.
Vivimos los tres juntos y lo pasamos muy bien, aquí tenemos comida, mantillas y unas casitas donde nos ponemos los tres juntos a dormir por las noches. Nico es mayor que nosotros y nos enseña cosas cada día
Al principio, Silvio y yo teníamos un poco de miedo, porque aquí hay muchos chicos y chicas (me ha dicho Niko que se llaman voluntarios), pero ahora ya no tengo miedo, porque todos estos humanos están con nosotros, nos dejan salir a jugar al patio y nos dan muchos mimos.
Los voluntarios dicen que deben encontrarnos una casa pronto, antes de que empiece a hacer más frío. Al parecer, cuando estás en una casa, tienes una familia que te quiere mucho y que te cuida todo el tiempo. Qué ganas tengo de probarlo.
Según los voluntarios, no debe ser difícil encontrarme un hogar, dicen que soy un perrito muy guapo, cariñoso, obediente y que soy un amorcillo.
Si soy tantas cosas, pues quizás tengan razón los voluntarios y pronto puedo tener una familia.

Adopción.
Una pareja simpática se enamoró de mí, y yo de ella, así que hace unos días que me llevan arriba y abajo, me han revisado de arriba abajo, he ido a conocer la casa y la familia y ahora resulta que la familia es la mía. No puedo estar más feliz.

Incluso me han asignado un hashtag a Instagram. Puede seguir mi aventura en #silvio_elcauamic
Avui, he sentit el que deien els amos i m’ha fet gràcia:
“¡Silvio nos ha robado el corazón! Desde la primera vez que lo vimos nos enamoramos de él. Gracias a la protectora “El cau amigo” por hacer de un sueño una realidad, sin su trabajo esto no habría sido posible. Y sobre todo Gracias a Helena y Peter por la confianza y el amor que transmiten. Estamos inmensamente felices de formar parte de la vida de Silvio. ¡El mejor compañero de vida!”