#MEMORIAL ROC

Entre los peludos del Cau Amic solemos distinguir dos grupos:
Los temporales, normalmente perritos jóvenes, cachorros, de color claro / marrón, que tienen la suerte de encontrar más o menso rápido, con la ayuda de los voluntarios y gracias al trabajo de muchos en el campo “comunicación”, un nuevo hogar.
Y ahí están los “invisibles”, normalmente perros más grandes, con algún trauma debido a experiencias feas en su pasado.
Un representante de este último grupo ha sido Roc, un Rottweiler, que llegó a pesar unos 45 kg. Con estos kilos y un porte impresionante nos acompañó unos 4 años, a pesar de múltiples intentos de encontrarle un nuevo hogar.
Queremos creer, que han sido, en lo posible, buenos años para él. Nos hizo entender rápido, que su entorno favorito era la riera de Rubí. Ahí encontró pronto un espacio con algo de profundidad que le facilitó su juego especial: haciendo piruetas en el agua, pegando con sus patas enormes el agua, buscando salmones, pensamos, haciendo de oso de Alaska.
Probablemente era un gourmet y posiblemente no hemos sido capaces de ofrecerle su comida preferida, los salmones. Pero se contentó con lo que había y a veces, listo que era, encontró algo especial en el camino. ¡Ni pensar quitárselo!
La historia de Roc ha tenido un final triste.
Los voluntarios lo encontraron una mañana muerto en su jaula. Lo más seguro es, que se le había enredado se intestino, problema mortal sobre todo para perros grandes.
A Roc siempre le recordaremos como el rey de las piruetas y su lugar preferido ahora y para siempre lleva el nombre “ La Playa del Roc”.

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